Estamos en un mundo en el que acostumbramos a reproducir, a copiar de otros y a ir por el camino fácil. La creatividad, la imaginación, las ideas propias están quedando relegadas a un segundo plano cuando, no lo olvidemos, las personas que triunfarán en el siglo XXI son aquellas capaces de crear por sí mismas y de convertir en algo creativo su trabajo.
Empecemos ya. ¿A qué estamos esperando? En estos días, estamos debatiendo en clase sobre lo que es el arte y sus manifestaciones. ¿Y quien dice que dentro de cada uno de vosotros y vosotras no hay un artista escondido que está deseando salir? ¿Lo demostráis? ¿Aceptáis el reto?
La actividad consiste en algo muy fácil y difícil a la vez. Os voy a repartir en clase una emoción diferente a cada uno de vosotros y vais a tener que representarla artísticamente como queráis (pintura, escultura, fotografía, vídeo, performance,...). Lo importante es que comuniquéis algo con lo que vayáis a hacer.
Las emociones son: Culpa, Amor, Irritación, Deseo, Felicidad, Entusiasmo, Melancolía, Aburrimiento, Odio, Ternura, Asombro, Serenidad, Tristeza, Miedo, Ira, Ilusión, Decepción, Confusión, Frustración, Inseguridad, Asco, Placer y Soledad. ¿Cuál te tocará a ti?
Pues bien, una vez repartidas las emociones, viene otra cuestión. ¿Cómo hago yo esto? Bloqueo mental y barrera psicológica al canto. Ese sentimiento es el mismo que sufren los escritores ante el folio en blanco pero que logran superar empezando a trabajar. Eso mismo vais a hacer vosotros: trabajar la idea.
El proceso creativo tiene unas fases que os ayudarán a llegar a lo que queréis comunicar. Tener claras las fases os servirá para facilitar que las ideas fluyan y que podáis realizar unas obras merecedoras de los mejores museos. Os dejo el esquema del proceso creativo que debéis tener en cuenta a la hora de realizar el trabajo:
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| Fuente: http://www.behance.net/gallery/El-proceso-creativo/2286508 (Oscar Llorca) |
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